Una Sociedad de Propósito Especial (SPV) es una entidad legal independiente y autónoma creada con un propósito social específico, por lo general, para llevar a cabo una transacción financiera particular o gestionar un activo o pasivo específico. La constituyen una o varias sociedades patrocinadoras y a veces también denominadas también como sociedades gestoras.
Utilidad de las SPV
En el ámbito financiero, las SPV se utilizan para aislar ciertos activos o pasivos de una empresa matriz, lo que ayuda a proteger los intereses de los inversores y mitigar riesgos asociados a transacciones complejas o de alto riesgo, especialmente en los mercados inmobiliarios o de capitales. Las SPV se constituyen con un objeto social concreto, y suelen incluir una serie de fórmulas contractuales y pactos de socios que no serían viables para la empresa patrocinadora debido a la diversidad de sus negocios.
Como hemos indicado las SPV, se constituyen como entidades completamente autónomas desde todos los puntos de vista legales o societarios, por lo que su balance no puede ser consolidado con la empresa patrocinadora.
Características de las SPV
Las SPV son entidades autónomas desde el punto de vista legal y societario, por lo que su balance no puede ser consolidado con el de la empresa patrocinadora. Los patrocinadores pueden dotar a las SPV de patrimonio fundacional mediante la transmisión de activos necesarios, a través de acuerdos contractuales o fideicomisos. En proyectos inmobiliarios, es habitual crear una SPV para cada proyecto, ajustando así los criterios de financiación, garantías y gestión del activo sin interferir en la operativa habitual del promotor inmobiliario.
¿Cuál sería su forma legal y proceso de constitución?
El proceso para constituir una SPV en España sigue los procedimientos estándar para la formación de entidades legales:
- Reserva del Nombre: Verificar la disponibilidad del nombre propuesto mediante una solicitud en el Registro Mercantil Central.
- Redacción de los Estatutos: Preparar y firmar ante notario los estatutos que establecen la estructura y el propósito de la SPV.
- Depósito de Capital: Se suele requerir un depósito de capital inicial para la creación de la SPV. La cantidad mínima de capital puede variar dependiendo del tipo de entidad legal que se esté formando, aunque lo normal es constituirla como sociedad limitada, con un capital de unos 3.000 euros, que no es necesario depositar en una cuenta previamente.
- Registro en el Registro Mercantil: Una vez que se han redactado los estatutos y se ha depositado el capital, se debe presentar la documentación ante el Registro Mercantil para su registro e inscripción oficial.
- Obtención del Número de Identificación Fiscal (NIF): La SPV debe obtener un NIF, que es un número de identificación fiscal que permitirá a la entidad realizar operaciones comerciales en España.
¿Y cuál es la ventaja?
- Independencia y Protección: La principal ventaja de una SPV es su estructura independiente, que opera separadamente de la empresa matriz. Esto protege los activos de la empresa principal en caso de problemas financieros dentro de la SPV. La SPV puede utilizarse en modelos de inversión basados en equity (participación en la sociedad) o deuda (préstamo).
- Limitación de Responsabilidad: Para los inversores en plataformas de crowdfunding como URBIX, invertir a través de una SPV limita el riesgo de pérdida al capital contribuido a esa entidad específica, ofreciendo mayor seguridad financiera y protección legal.
- Transparencia y Simplificación: Las SPV brindan transparencia y simplifican la estructura de inversión, ya que los inversores pueden ver claramente dónde se destinarán sus fondos y cómo se gestionarán. Esto fomenta la confianza al saber exactamente en qué se está invirtiendo.
- Flexibilidad: Las SPV ofrecen flexibilidad en la estructuración de acuerdos de inversión, al tener una entidad legal separada para cada inversión, los inversores pueden adaptar fácilmente los términos y condiciones de acuerdo con las necesidades específicas de cada proyecto, sin afectar otras inversiones.
Resumen
Utilizar una Sociedad Limitada o SPV en una plataforma de crowdfunding como URBIX ofrece a los inversores limitación de responsabilidad, transparencia, simplificación de la estructura de inversión y flexibilidad en los acuerdos. Estas ventajas combinadas brindan un entorno seguro y eficiente para que los inversores participen en proyectos de inversión, maximizando su potencial de retorno y minimizando los riesgos asociados.
En URBIX, estamos comprometidos con ofrecer las herramientas y oportunidades más innovadoras para diversificar carteras y proteger inversiones. Con las SPV, no solo garantizan transparencia y seguridad, sino también una flexibilidad y eficiencia que consolidan la protección jurídica y financiera.
Te invitamos a explorar nuestro portafolio de proyectos inmobiliarios y unirte a la comunidad de inversores profesionales.
Equipo URBIX
Escrito por:
Valeria Montemayor
Content Marketing
Lidera el content creation en URBIX y es especialista en marketing digital. Con su creatividad y conocimiento en estrategias digitales, Valeria asegura que nuestros contenidos sean atractivos, informativos y alineados con los valores y objetivos de URBIX.